viernes, 4 de noviembre de 2016

En días de dolor un abrazo recogía mis piezas rotas

Cuando pasan cosas que se escapan de nuestro control y sientes la traición de primera mano. Nunca antes el dolor fue tan real al punto de sentir físicamente como se partía el corazón, al punto de sentir un crash de algo quebrandose por dentro, al limite de querer desaparecer.
Nunca tantas lágrimas fueron derramadas hasta quedar dormida, ni que decir de las ojeras hinchadas que se formaron alrededor de los ojos.
Andaba en automático tomando pastillas para un dolor en el alma que no podía anestesiarse.
En un intento de desesperación la automotivación repetía una y otra vez "todo va a estar bien" pero nada cambiaba alrededor. Descubres que esa típica frase que todos te dicen de consuelo no es mágica, ni cambia la situación al sonar de un chasquido.
En días de dolor un abrazo recogía mis piezas rotas, un "te entiendo" las sacudía del polvo, una oración las unía de nuevo.
Mis piezas rotas, se han ido pegando de a poquitos con mucho amor... y cuando nadie podía consolar mis lágrimas solo la infinita paz que Dios nos da me hacia descansar en medio de una alabanza.
Sal del lamento! me dijo un no creyente el otro día y esto realmente me movió. El lamento es un estado de ánimo en el que simplemente ves tu problema más grande que cualquier solución y empiezas a victimizarte y a hundirte en la depresión. Identificar como me encontraba en ese momento realmente me alarmó al punto de tomar acciones para salir de ese lugar. El lamentarse no tiene absolutamente nada de provecho y es una señal de que en momentos así uno necesita creerle más a Dios que al mundo.... CREER de que Dios realmente obrará y hará un milagro.
Cuando nos pasan cosas fuertes es fácil olvidarnos quienes somos y las promesas que existen en nuestras vidas, es fácil olvidar la palabra de Dios cuando tu corazón está divagando en cosas sin sentido, en el enojo, en la tristeza, en la sed de justicia, es fácil decir me rindo y querer tirar la toalla porque te sientes totalmente perdido y cegado... Pero Dios a pesar de todos tus olvidos ESTA CONTIGO y te ve como a la niña de sus ojos y te vuelve a recordar todas las promesas que él tiene para ti. Él siempre te guía y te muestra la salida como mejor sabe hacerlo.
En este tiempo solo me queda decir que rendida en su amor y en su gracia estoy saliendo adelante. Que aunque pase por valle de sombra y de muerte no temeré mal alguno porque Dios está conmigo. Que aunque no entienda en estos momentos el porqué de muchas cosas, se que su propósito se cumplirá en mi vida y me guiará hacia un destino glorioso. Que Dios siempre tiene planes de bien y no de mal a fin de darme un futuro y una esperanza 😊💖
Salmos 139:14-16 💖
«Te alabo porque soy una creación admirable! Tus obras son maravillosas y esto lo sé muy bien! Mis huesos no te fueron desconocidos, cuando en lo más recóndito era yo formada, cuando en lo mas profundo de la tierra era yo entretejida. Tus ojos vieron mi cuerpo en gestación, TODO ESTABA YA ESCRITO EN TU LIBRO; Todos mis dias se estaban diseñando aunque no existía uno solo de ellos» 

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